Bacterias tipos y características
Su movilidad contribuye a su capacidad de infectar diferentes tejidos.
Se forman en superficies de implantes médicos, tuberías y dientes. Las bacterias Gram-negativas poseen una membrana externa adicional que protege su pared celular. Esto dificulta su erradicación en ambientes contaminados. Las endosporas pueden sobrevivir a altas temperaturas, radiación y deshidratación.
Estudiarlas ayuda a comprender los orígenes de la vida en la Tierra. Representan un desafío significativo en medicina y en la industria. La mayoría de las bacterias conocidas son heterótrofas. Son importantes para el ciclo del carbono y la producción de oxígeno.
El género *Streptococcus*, por ejemplo, pertenece a este grupo y puede causar faringitis. Las bacterias anaerobias no necesitan oxígeno para sobrevivir y prosperar. Esta característica las hace susceptibles a ciertos antibióticos como la penicilina.
Las bacterias móviles se desplazan mediante flagelos, cilios o movimientos deslizantes. Algunas bacterias forman endosporas, estructuras resistentes a condiciones ambientales adversas. Participan en la descomposición y el reciclaje de nutrientes en los ecosistemas.
Su capacidad de movimiento les permite buscar nutrientes y evitar peligros. Su presencia en el agua indica contaminación fecal y un riesgo para la salud. *Rhizobium*, una bacteria que vive en las raíces de las leguminosas, es un ejemplo clave.
Su adaptación a estas condiciones extremas las hace valiosas para la investigación biotecnológica. Se clasifican según su morfología en cocos, bacilos y espirilos, entre otros. Las enzimas de las bacterias termófilas son estables a altas temperaturas.
Su simbiosis con las plantas beneficia tanto a la bacteria como a la planta.